-Léame el titular.
-Condenado por abusos deshonestos y ofensas al jefe del Estado -lee Diego.
El jefe de Negociado cierra el periódico y cruza los brazos sobre él.
-En obsequio de la brevedad, le resumiré la noticia: un mozo de la localidad extremeña de Oliva compra una moto Ossa de segunda mano e invita a la novia a dar un paseo. La prometida del interfecto, una muchacha de familia afecta al Movimiento, de derechas de toda la vida, de moralidad intechable, obtiene el pertinente permiso de la madre. Extremando la modestia, la muchacha se monta a mujeriegas en el transportín del vehículo, despliega un púdico pañuelo sobre las rodillas y avisa al novio: "Cuando quieras". Él arranca, mete gas al motor, petardea un poco por la plaza del pueblo espantando a las gallinas y, con el pretexto de que quiere ver cómo se porta la Ossa en carretera, sale del pueblo y lleva la moto hasta un lugar solitario, donde corta el gas detrás de una tapia, y le espeta a la novia: "¡Bájate, que hoy no te salva ni Franco!" Ya se puede imaginar lo que sigue. Cuando el juez lo llama a declarar, el tío alega que ella había dicho "cuando quieras" ante testigos.
Diego comprende:
-¡Claro, leyendo el texto uno capta la situación -prosigue el aspirante a censor -, pero el titular de la noticia, tal como está redactado, mueve a pensar que el que fue objeto de abusos deshonestos fue... el Caudillo.
-¡Exacto! -aprueba don Tancredo-. ¡Ha dado usted en el clavo! ¡Imagínese la enormidad: el Caudillo víctima de abusos deshonestos a manos de un gañán de la dehesa extremeña! ¡Sólo pensarlo produce alferecía!
Juan ESLAVA GALÁN, De la alpargata al Seiscientos, Planeta, Barcelona, 2010.