Hemingway dijo que nada le resultaba tan gratificante como el acto mismo de escribir, cuando las palabras cobraban alas, cuando la mano seguía al pensamiento, y el pensamiento remontaba y la pluma trazaba su vuelo. El único placer que yo obtengo de escribir viene cuando, después de haber escrito algo y haberlo guardado, lo releo más tarde y encuentro que tiene sentido..., es una sensación fundamentalmente de alivio. Pero me dije: "Bueno, es Hemingway el que habla. Supongo que para él sí es un gozo el escribir".
John HUSTON, A libro abierto, Espasa-Calpe, Madrid, 1986.
John HUSTON, A libro abierto, Espasa-Calpe, Madrid, 1986.