Jorge Luis BORGES: "Nadie puede leer dos mil libros. Yo no habré pasado de una media docena. Además no importa leer, sino releer."

martes, 17 de abril de 2012

TASSO: No me estaba...


Conchita pidió permiso para hablar conmigo.

—¿Sí, Conchita? ¿Qué te pasa?

—Nada, señora. Sólo quería decirle que lo que pasó esta tarde fue un malentendido.

—¿A qué te refieres?

—Lo de Mistress Denetra... lo que dijo. No me estaba..., señora. Me dolía el esparadrapo y quise despegarlo un poco. Pero le juro que no me estaba... No me habría atrevido a hacer eso, allí, delante de ustedes. Jamás. Se lo juro, señora.

—Quédate tranquilo. No te va a pasar nada, si es lo que temes. Siempre y cuando nos sirvas como es debido.

—Por supuesto, señora Valérie. No lo dude. Estaré encantado de servirlas esta noche.

—Perfecto. Así que ahora ven con nosotras. Vas a arreglar el traje de Lady Monique y limpiar nuestras botas para que estén relucientes esta noche —le ordené—. Y luego, te arreglarás un poco, que das una pena que no te imaginas. No puedes entrar en el salón de Su Majestad con las medias rotas, mírate...

Valérie TASSO, Al otro lado del sexo, Plaza y Janés, Barcelona, 2006.