Jorge Luis BORGES: "Nadie puede leer dos mil libros. Yo no habré pasado de una media docena. Además no importa leer, sino releer."

domingo, 10 de julio de 2011

ESLAVA GALÁN: En busca del unicornio

"Hasta se me pasó por la imaginación, en la flaqueza de un momento, que me escogieran por más mentecato y menos avisado que los otros, antes que por más valiente y esforzado, como creía."

"El caso es que ellos son demasiadamente desconfiados y no sé si serán tan desconfiados porque son muy embusteros y engañadores o si son así de embusteros o engañadores porque son muy desconfiados."

"Soy ferviente cristiano y en todo presto a admitir lo que la Iglesia enseñe tanto si lo entiendo como si no lo entiendo."

"No cumplía ponerse a llorar sobre los tiestos rotos."

"Un catalán es mal entendido en Castilla y un castellano es mal entendido en Valencia y un vascongado es mal entendido en todas partes."

"Y había por todas partes griterío y luces con que los moros celebraban la victoria del Miramamolín igual que hubieran celebrado su derrota y la victoria de su enemigo Abdamolica."

"Y otra cosa de maravilla y digna de nota es cómo entre los negros hay dos o tres rostros y no hay más, no como entre los blancos, que cada uno tiene su cara y por mucho que se busque no se encuentran dos iguales, como no sea en hermanos del mismo vientre. Por eso, los negros, para distinguirse entre ellos, van todos marcados de un modo u otro y unos tienen cicatrices en el rostro, que ellos mismos se hacen cuando son niños, como si se bautizaran, y a otros les falta un dedo o media oreja o están señalados de pedradas o tienen un chirle o alforzas de látigo y otras señas igualmente buenas."

"¿Qué puede decirse de una ley que prohíbe a los hombres el vino y el cochino, tan consoladores?"

Juan ESLAVA GALÁN, En busca del unicornio, Planeta, Barcelona, 1999.