Jorge Luis BORGES: "Nadie puede leer dos mil libros. Yo no habré pasado de una media docena. Además no importa leer, sino releer."

sábado, 10 de marzo de 2012

HARRIS: ¿Los vampiros actúan así?


—¿Los vampiros actúan así? —susurré. Tenía la garganta dolorida y magullada en la zona donde había apretado Jerry—. Son horribles.

Me senté, sollocé y me enjuagué la cara con un pañuelo que me entregó Bill. Sentí curiosidad por enterarme de para qué necesitaba un pañuelo un vampiro, lo que probablemente constituyese un pequeño destello de serenidad, inundado por la marea de lágrimas y nervios. Bill tuvo el sentido común necesario para no abrazarme. Se sentó en el suelo y mostró la delicadeza de mantener apartada la mirada mientras yo me secaba la cara.

—Cuando los vampiros viven en nidos —comenzó a explicar de manera repentina —suelen volverse más crueles porque se impulsan los unos a los otros. Siempre están tratando con otros vampiros como ellos, y así se convencen de lo lejos que se encuentran de la humanidad. Dictan sus propias leyes. Los vampiros como yo, que viven solos, recuerdan un poco mejor su antigua humanidad.

Charlaine HARRIS, Muerto hasta el anochecer, La Factoría de Ideas, Madrid, 2004.